Me encanta la gente que critica, sobre lo que otro hizo o creó.
Me encanta la gente que corrige al otro.
Me encanta la gente que vive tan pendiente de lo que haces o dejas de hacer.
Me encanta la gente que copia lo que otros hacen.
Me encanta la gente que se compara, me encanta la gente que acusa, señala lo negativo y juzga sin piedad.
Me encanta la gente que envidia y maltrata al otro.
Me encanta la gente que piensa negativo, desmotivada, pesimista, del mal humor y triste.
Me encanta la gente que no cree en el amor, me encanta la gente que no cree en la amistad de corazón en el servicio desinteresado a otro. Me encanta la gente que me pone obstáculos en el camino, que me lo hace difícil.
Me encanta la gente que se queja de todo.
Me encanta la gente que le encanta la competencia.
Me encanta la gente que no apoya a otros para que crezcan y cada día sean mejor.
NO PIENSES QUE ME VOLVI LOCA, ahora te explico porque me encanta.
Primero me encanta porque son seres humanos, que no aprendieron a ser felices y se convierten en mi reto de amor.
Todos los que a lo largo de mis años me han criticado son los maestros que la vida me regaló para mejorar, sus críticas se convirtieron en ASPECTOS DE MEJORA, aprendí desde mi corazón a agradecer a quien me corrigió y a quien me corrige.
Aprendí que quien está pendiente de lo que hago o dejo de hacer es por dos razones: me ama o me admira, si no son esas sus razones está invirtiendo mucho tiempo en mí, lo cual le agradezco.
Aprendí y aprendo de la gente que copia lo que hago, eso significa que es bueno, útil e interesante para otros; eso sí, lo que más me encanta y me llena de satisfacción es cuando lo mejora, lo hace mejor que yo, eso me motiva a crear más y más.
Aprendí y aprendo de la gente que se compara conmigo eso ratifica que lo hago muy bien.
Aprendí y aprendo tanto de la gente que acusa, señala o juzga, a no hacerlo, que mi corazón se llena de un inmenso agradecimiento a todos por ser los modelo que me niego totalmente a repetir o reproducir en mi vida, lo que me ha permitido tener un gran compromiso personal y profesional.
Aprendí y aprendo de la gente envidiosa y maltratadora, que existe una “envidia sana” cuando imitas lo que otro hace para lograr lo que ha logrado mejorándolo y del gran maestro llamado maltrato aprendí a poner los limites, estar allí sin que me afecte, o salir de allí sin sentirme afectada o culpable.
Aprendí y aprendo cada día la importancia de ratificar en mí el optimismo, el pensamiento positivo, la alegría y lo más bello aprendí, que la motivación es interna, que ningún ser humano tiene poder sobre mis estados emocionales; que puedo estar triste o feliz, con buen o mal humor y que eso es mi responsabilidad.
Aprendí y aprendo gracias a tanta gente que los obstáculos se vencen, que la dificultad se puede convertir en positivo solo con un cambio de actitud y cambieéla actitud, así de sencillo; ahora los obstáculos en mi vida son oportunidades.
Hoy en día gracias a tantos Maestros aplico el servicio desinteresado, solo por el amor a servir, ser útil y apoyar a otros siendo feliz, mirando sus logros. Y lo mejor en mi vida, sino puedo aportarte algo para que seas mejor, ten la seguridad que no te criticaré, no competiré contigo.
Solo recuerda que si me dejas apoyarte y te dejas apoyar, mientras Dios me de vida y salud estaré aquí para darte mi mano amiga.
Siempre Luciamelia
----------------------------------
He tenido la oportunidad de encontrarme con este texto tan sencillo pero tan clarito. Me permito compartirlo con vosotros; proviene del