Cuando hablamos, le estamos dando vida a lo que estamos diciendo, plantamos una semilla. Vamos a obtener exactamente lo que estamos diciendo.
Las palabras son como semillas; tienen poder
creador. Somos quienes somos hoy debido a las palabras que hemos dicho
en el pasado. Todas nuestras palabras se convertirán en una profecía
auto-realizable. Escuchen lo que dicen acerca de ustedes mismos. Los
pensamientos negativos no necesitan convertirse en palabras negativas.
En el momento en que dicen algo abiertamente, toma un significado
totalmente nuevo y una energía totalmente nueva. Si no les gusta lo que
están experimentando, comiencen a cambiar sus palabras…
Profetizamos el futuro mediante las palabras que pronunciamos en el
ahora. Nuestras palabras son siempre una profecía auto-realizada. No
planten semillas negativas, sólo profeticen lo bueno y la intención del
bien. Pueden cancelar los planes mejor trazados del Universo con sus
propias palabras y cavilaciones negativas. La muerte y la vida son el
poder de sus palabras. Tendrán lo que digan.
Sus palabras van a dar vida
exactamente a lo que están expresando.
Es preferible no decir
nada a decir algo negativo. Las palabras negativas cancelan el plan de
Dios… ustedes están maldiciendo su futuro, están maldiciendo su vida con
sus palabras. Pueden utilizar sus palabras para maldecir su vida o las
pueden utilizar para bendecir su vida. Expresen palabras de Fe; declaren
las bondades de Dios en su luz y en su corazón. Cambien la atmósfera de
todo lugar al que vayan con sus palabras; invoquen lo bueno, invoquen
la luz, invoquen al amor e invoquen la ayuda divina.
No hablen
de problemas, hablen de soluciones. No somos reporteros de nuestra vida,
somos los pronosticadores de nuestra vida. Deberíamos llamar a lo
invisible como si ya fuese visible. Invoquen lo que desean, llámenlo con
palabras llenas de fe, llámenlo con luz. Cambien su mundo al cambiar
sus palabras. La muerte y la vida están en poder de su lengua. ¿Están
dando a luz o están destruyendo?
Las circunstancias se alinean
con cada palabra que dicen; sus palabras son una profecía
auto-realizada.
Ustedes son los creadores de sus propias circunstancias.
Pueden cambiar lo que crearon con sus palabras.
Cuando actuamos en
forma negativa ante los cambios repentinos y el caos en nuestra vida,
estamos retrasando el propósito de su creación. Si aceptamos el caos
como una oportunidad para la elevación espiritual, entonces el dolor
desaparecerá. Nosotros solos determinamos la rapidez con la que pasa la
agitación. Hay futuros innumerables que existen al mismo tiempo. Nuestro
propio comportamiento determina en qué universo ingresaremos. La
profecía está viendo el futuro en nuestras acciones presentes.
Post: Leo H.