lunes, 12 de agosto de 2013

3. Formas de intoxicación


Intoxicación interna o autotoxemia. En el metabolismo o funcionamiento normal del organismo se forman sustancias de desecho que si no pueden ser eliminadas se acumulan en el interior del cuerpo (urea, ácido úrico, ácido láctico, dióxido de carbono, creatinina…). Estas sustancias se producen incluso llevando una forma de vida sana, aunque se generan en muchísima mayor cantidad llevando una vida “normal”. Igualmente en los procesos de destrucción o degeneración de alguno o más órganos se forman sustancias tóxicas: necrosis de algún tejido por falta de aporte sanguíneo y de oxígeno, tumores malignos que degeneran…

Intoxicación intestinal. Es la intoxicación causada por la fermentación de los alimentos y la formación de sustancias tóxicas a la que dan lugar. Su origen es múltiple: consumo de alimentos no adecuados a la fisiología del ser humano; comer en exceso, sin hambre, deprisa, muy cocinados, con muchas mezclas (incompatibilidades)…

Intoxicación externa. Es el acumulo de tóxicos provenientes del exterior, son sustancias extrañas a la composición normal del organismo: contaminantes del aire y del agua (agua clorada); tóxicos como el café, alcohol, tabaco, otras drogas, medicinas, vacunas…Alimentos tolerados por el organismo pero no recomendables: carnes, pescados, alimentos refinados, sal, vinagre, alimentos industrializados ricos en conservantes, colorantes, aromas y otros aditivos. Contaminación por las radiaciones eléctricas, rayos X, televisión, centrales nucleares, gamagrafías…Estos últimos elementos actúan volviendo tóxicas las sustancias propias del organismo. Insecticidaas, pesticidas, herbicidas y abonos químicos utilizados en la agricultura (contaminación de la tierra), etc., etc…

Intoxicación mental y emocional. Esta intoxicación está originada por las sustancias tóxicas generadas por las tensiones nerviosas, preocupaciones, miedos, soledad, frustraciones, pensamientos erróneos, emociones mal canalizadas, celos, envidias, mentiras, excesivo trabajo intelectual…

La intoxicación mental y emocional provoca igualmente unos bloqueos energéticos que se acompañan de tensiones musculares y de la disminución de la respiración profunda y relajada, dando lugar a una disminución de la captación de la energía y su libre circulación por el organismo, con lo que se favorece el AGOTAMIENTO.

Fuente: http://luz-kaliha.blogspot.com.es. Lorena Rodríguez Fernández.